Canción de amor propio*
* Actualizado con "la prueba del delito"
A veces me desdoblo y me digo al oído:
"¡Qué bueno respirar, sentirte vivo!
¡Qué bueno que te cruces por mi camino!".
Rodeado de un espejo circular,
soy feliz con esta esquizofrenia tan particular.
¡Qué grato es encontrarme vaya donde vaya!
Por más que me cuento mis chistes
siempre me hacen gracia.
Si me voy, si me duermo, la vida se apaga.
¡Qué potra saber que siempre me seré fiel!
¡Qué suerte desde un principio caerme tan bién!
Y voy y me levanto cada mañana,
feliz y seguro.
Me hago el desayuno,
me lo sirvo en la cama,
y allá voy,
menudo soy,
me dedico un arrechucho:
sexo seguro,
sin riesgos, sin contemplaciones,
dudo que nada me satisfaga mejor que un servidor,
menudo soy para el amor.
Y que le voy a hacer si la gente
me condenó al olvido, a ser autosuficiente,
si con eso sobrevivo, que no es poco,
mejor loco que mal acompañado.
¡Qué bonita, qué divertida es conmigo la convivencia!
¡Descojonarme de mi última ocurrencia!
Y esperarme despierto, vuelva a la hora que vuelva,
o cocinar para mí mi plato favorito,
no encontrar en el baño más pelos que los mios.
Sólo yo controlo, sólo yo determino,
mis hábitos de higiene.
Lloro en mi hombro cuando nadie me entiende.
Si me siento solo miro a la luna,
me juro amor eternamente.
Rodeado de un espejo circular,
soy feliz con esta esquizofrenia tan particular.
Y voy.
Y voy y me levanto cada mañana,
Feliz y seguro.
Me hago el desayuno,
me lo sirvo en la cama,
y allá voy,
menudo soy,
me dedico un arrechucho:
sexo seguro,
sin riesgos, sin contemplaciones,
dudo que nada me satisfaga mejor que un servidor,
menudo soy para el amor.
Y que le voy a hacer si la gente
me condenó al olvido, a ser autosuficiente,
si con eso sobrevivo, que no es poco,
mejor loco que mal acompañado.
Y voy y me levanto cada mañana,
feliz y seguro.
Me hago el desayuno,
me lo sirvo en la cama,
y allá voy,
menudo soy,
me dedico un arrechucho:
sexo seguro,
sin riesgos, sin contemplaciones,
dudo que nada me satisfaga mejor que un servidor,
menudo soy para el amor.
Y que le voy a hacer si la gente
me condenó al olvido, a ser autosuficiente,
si con eso sobrevivo, que no es poco,
mejor loco que mal acompañado.
Ismael Serrano - Canción de amor propio
Al despertar, muerto de sueño como siempre y con esa pereza infinita propia de las 6:50 hora zulú me he acordado de esta canción y tarareándola por lo bajini he ido primero al baño y luego a la cocina a desayunar. Estaba ya mano a mano con las natillas cuando he levantado la vista y, en los azulejos, junto a la nevera, un ser-de-ocho-patas verde, enorme. Me he acojonado yo solo, he intentado seguir desayunando como si nada pero ha sido imposible. Armado de cepillo y cogedor, me he enfrentado a la temible criatura y la he acabado tirando al patio por la ventana del tendedero (si, una guarrería, pero a esas horas de la la mañana no se me ha ocurrido lugar mejor)
Y mira que a mi no me dan asco las arañas, ellas hacen su trabajo y se comen a muchos bichitos que me pican ... pero era tan grande (casi como una aceituna!!!!) y tan verde :(
pd. omito el nombre del ser-de-ocho-patas verde para no asustar a Marta.
4 comentarios
Marta -
He bajado la página con el ratón, para ver tu segundo post de hoy, y toma. Imagen al canto. Tengo la carne de gallina!
lara -
Besos.
Marta -
Raquel -