Incertidumbre
"como un laberinto de incertidumbre
esquivas la pesadilla
y sobrevolar el cansancio
y en un instante
en tierra otra vez"
(Heroes del silencio/La Sirena varada)
Puede que leer este post de olvido os ayude a entender por qué escribí el post anterior.
Y este pseudo-relato/ pensamiento ...también.
Gracias a tod@s por vuestros comentarios, son tan cálidos como un abrazo...
Mar de dunas, océano de incertidumbres (agosto de 2001)
Mi vida se me antoja idéntica a la travesía de un erg (un mar de dunas). Sabes cuando has empezado a recorrerlo, al igual que conoces el día en que naciste (¡A la luz!).
También recuerdas la duración de esa travesía: metros, kilómetros, horas, días, meses, años, eones ¿acaso importa?
Ignoras cuando acabará, y eso te inquieta. Puede que una milla, puede que mil, ¿puedes soportar la incertidumbre de un futuro desconocido, imposible de predecir, sujeto a las caprichosa leyes de la casualidad, del azar, de la fatalidad?
Puedes morir dentro de una fracción de segundo o dentro de cuarenta años y con esa certeza implacable has de levantarte cada mañana al despuntar el alba, con el saco de dormir lleno de arena y la mente de esperanzas vanas, inútiles.
Ignoras la que hay tras coronar cada duna, quizás una larga y fácil planicie, quizás una pendiente cortada rozando la verticalidad. Y aún así has de afrontar cada una de ellas gas a fondo, porque sin impulso estás condenado a permanecer eternamente en el mismo lugar, eternamente tratando de superar un y otra vez la misma maldita pendiente.
Así que maldices esa mole de arena, te pones de pie sobre los estribos y roscas en puño a fondo, sintiendo como la rueda trasera derrapa en la arena.
esquivas la pesadilla
y sobrevolar el cansancio
y en un instante
en tierra otra vez"
(Heroes del silencio/La Sirena varada)
Puede que leer este post de olvido os ayude a entender por qué escribí el post anterior.
Y este pseudo-relato/ pensamiento ...también.
Gracias a tod@s por vuestros comentarios, son tan cálidos como un abrazo...
Mar de dunas, océano de incertidumbres (agosto de 2001)
Mi vida se me antoja idéntica a la travesía de un erg (un mar de dunas). Sabes cuando has empezado a recorrerlo, al igual que conoces el día en que naciste (¡A la luz!).
También recuerdas la duración de esa travesía: metros, kilómetros, horas, días, meses, años, eones ¿acaso importa?
Ignoras cuando acabará, y eso te inquieta. Puede que una milla, puede que mil, ¿puedes soportar la incertidumbre de un futuro desconocido, imposible de predecir, sujeto a las caprichosa leyes de la casualidad, del azar, de la fatalidad?
Puedes morir dentro de una fracción de segundo o dentro de cuarenta años y con esa certeza implacable has de levantarte cada mañana al despuntar el alba, con el saco de dormir lleno de arena y la mente de esperanzas vanas, inútiles.
Ignoras la que hay tras coronar cada duna, quizás una larga y fácil planicie, quizás una pendiente cortada rozando la verticalidad. Y aún así has de afrontar cada una de ellas gas a fondo, porque sin impulso estás condenado a permanecer eternamente en el mismo lugar, eternamente tratando de superar un y otra vez la misma maldita pendiente.
Así que maldices esa mole de arena, te pones de pie sobre los estribos y roscas en puño a fondo, sintiendo como la rueda trasera derrapa en la arena.
6 comentarios
Dragonfly -
Marta -
dragonfly (currando) -
Yo ya no busco un oasis, me conformo con levantarme cada día vivo y entero...
Aunque nadie lo diría, soy una persona en cierto modo bastante cuadriculada, me gusta tenerlo todo previsto, saber a que atenerme.... Por eso me descoloca tanto la incertidumbre...
Este pseudo-relato o pensamiento lo escribía en un "mal" momento... más o menos como el de ahora...
Gracias por todo. Un beso
(se que es mucho pedir, pero espero que visites mi trastienda de vez en cuando)
Marta -
Una vez aclarada la duda, paso al comentario...
Se hacen inquietantes las palabras que usas. Cada día es una nueva aventura, y aunque muchas veces no podamos ver el camino que seguimos (siguiendo tu metáfora del desierto), sabemos (o intuimos) que hay un oasis al otro lado, y tenems que seguir caminando, entre dunas, para poder alcanzarlo.
besos
Ps. Es un placer leerte, aunque tarde en comentar :)
Dragonfly -
Uis... creo que me he explicado mal... El relato lo escribí en agosto de 2001, a pesar del tiempo sigo sintiendo y pensando lo mismo. Leí "La carta esférica" creo que en septiembre de 2000 y el pasaje que transcribe olvido fue uno de los que más me impactaron...
Marta -
Un beso.